La dependencia de los combustibles fósiles, los altos niveles de emisiones de gases de efecto invernadero y la creciente demanda de transporte han puesto en el punto de mira la necesidad de desarrollar soluciones de movilidad sostenible.
Entre estas soluciones, la movilidad eléctrica ha surgido como una opción prometedora, ofreciendo una alternativa más limpia y eficiente a los vehículos de combustión interna.
Los vehículos eléctricos representan un gran avance en este camino hacia la sostenibilidad.
Sin embargo, su éxito depende, en gran medida, de una infraestructura adecuada que permita su uso práctico, sencillo y eficiente. Aquí es donde entra en juego el concepto de electrolinera.
En este artículo, desde Chargeverse, especialistas en movilidad eléctrica, profundizaremos en el concepto de electrolinera, explorando su funcionamiento y entrando en detalle en la necesidad, cada vez mayor, que suponen para conseguir una movilidad eléctrica eficiente.
¿Qué es y cómo funciona una electrolinera?
De manera general, una electrolinera hace referencia a una estación de recarga para vehículos eléctricos.
De esta forma, así como una gasolinera provee combustible a los vehículos con motores de combustión interna, una electrolinera suministra electricidad a los vehículos eléctricos.
Una electrolinera puede poner a disposición de los usuarios diferentes tipos de cargadores, que varían en términos de potencia y velocidad de carga.
Así, algunas electrolineras pueden tener conectores de nivel 2, que son más comunes y generalmente ofrecen una carga más rápida que un enchufe convencional.
Otras pueden tener cargadores de nivel 3, también conocidos como carga rápida o carga ultrarrápida, capaces de cargar los vehículos eléctricos a velocidades mucho más altas.
Las electrolineras suelen estar conectadas a la red eléctrica convencional para obtener la energía necesaria.
Sin embargo, también pueden utilizar fuentes de energía renovable, como la energía solar o eólica, para alimentar sus cargadores y ofrecer así una alternativa sostenible para cargar los vehículos eléctricos.
A la pregunta de cómo funciona una electrolinera; el proceso es muy sencillo.
Básicamente, cuando un vehículo eléctrico llega a una estación de recarga, el propietario puede conectar su vehículo a la red eléctrica a través del cargador correspondiente, empezando así el proceso de recarga del mismo.
El tipo de recarga que se utilice dependerá de varios factores, incluyendo la capacidad de la batería del coche eléctrico, el tipo de conexión y la potencia de la estación de recarga.
Por su parte, las electrolineras suelen estar equipadas con sistemas de pago y autenticación para permitir a los usuarios llevar a cabo el pago de la carga de sus vehículos.
Cuánto cuesta cargar un coche eléctrico en una electrolinera
En referencia al último punto, la siguiente pregunta más común tiende a ser cuánto cuesta cargar un coche eléctrico en una electrolinera.
Pues bien, es importante saber que el precio de una electrolinera puede variar dependiendo de varios factores, como el proveedor de la estación de recarga, la ubicación de la estación, la hora del día y el tipo de recarga.
En general, el coste de la carga de una electrolinera se calcula en función de la cantidad de energía eléctrica consumida, medida en kilovatios-hora.
Así, las electrolineras suelen cobrar por kWh o pueden tener una tarifa fija por sesión de carga.
En cualquier caso, en general, cargar un coche eléctrico suele ser más barato que llenar el tanque de un vehículo de combustión interna con gasolina o diésel.
Es importante tener en cuenta que las tarifas de carga pueden ser diferentes según los proveedores de carga y las ubicaciones de la electrolinera.
Además, algunas electrolineras ofrecen suscripciones o programas de socios que pueden reducir los costes de carga para los usuarios frecuentes.
Qué protagonismo tienen las electrolineras en España
Centrándonos en las electrolineras en España, la red de recarga ha experimentado un notable crecimiento en los últimos años, y es que cada vez son más las empresas que deciden invertir en el desarrollo de esta infraestructura.
Además, desde el gobierno se han implementado diferentes planes y ayudas para promover la movilidad eléctrica y, en consecuencia, el despliegue de electrolineras.
Esto incluye incentivos fiscales, subvenciones y ayudas para la instalación de puntos de carga, impulsando así la adopción de vehículos eléctricos y las garantías de una infraestructura adecuada para su carga.
En España, además, también se ha desarrollado una red de electrolineras de carga rápida en carreteras principales y áreas de alto tráfico.
Estas estaciones de carga rápida permiten a los usuarios realizar viajes de larga distancia proporcionando una mayor comodidad y confianza en la conducción de vehículos eléctricos.
Además está facilitando la adopción de los vehículos eléctricos al eliminar la “ansiedad de autonomía”, es decir, la preocupación de quedarse sin carga y lejos de un punto de recarga.
En definitiva, las electrolineras desempeñan un papel crucial en el impulso de la movilidad eléctrica al proporcionar la infraestructura necesaria para cargar los vehículos eléctricos.
Sin duda, su instalación en las áreas urbanas, suburbanas y en las carreteras nacionales mejoran la accesibilidad y la conveniencia de cargar los vehículos eléctricos, reduciendo las preocupaciones que vienen por el nivel de autonomía de los coches eléctricos.
En conjunto, el desarrollo de una red amplia y eficiente de electrolineras es fundamental para promover la compra de vehículos eléctricos y avanzar hacia una movilidad más limpia y sostenible.
Desde Chargeverse, como expertos en instalación de puntos de recarga de coches eléctricos, te contamos todo lo que debes saber sobre movilidad eléctrica y sostenible. Visita nuestro blog y ¡no te pierdas nada!
