Legislación ITC BT 52

Legislación para puntos de recarga: ITC – BT 52

La evolución hacia un futuro más sostenible y ecológico pasa inevitablemente por la adopción de tecnologías más limpias, como la apuesta por los vehículos eléctricos en las carreteras. En este escenario, la infraestructura de recarga de estos vehículos juega un papel crucial. 

En este contexto, la legislación es imprescindible a la hora de establecer las bases para la instalación de puntos de recarga de vehículos eléctricos. En este ámbito normativo, la Instrucción Técnica Complementaria ITC – BT 52 se erige como un pilar fundamental en el marco legal que regula la instalación de infraestructuras de recarga eléctrica en España. 

¿Qué es la ITC BT 52 y qué normativa comprende? Desde Chargeverse, como especialistas en puntos de recarga eléctrica, ¡entramos en detalle!  

¿Qué es la normativa ITC BT 52?

La Instrucción Técnica Complementaria ITC-BT 52 parte del Reglamento Electrotécnico para Baja Tensión y establece las directrices y requisitos para las instalaciones eléctricas específicas en puntos de recarga para vehículos eléctricos. En otras palabras, ITC BT 52 establece los requisitos técnicos que deben cumplir los sistemas de recarga eléctrica para vehículos, con el objetivo de garantizar la seguridad, eficiencia y compatibilidad de estas instalaciones.

Con el fin de cumplir con estos objetivos, algunos de los aspectos que aborda la normativa ITC – BT 52 incluyen la ubicación de los puntos de recarga, las características eléctricas que deben cumplir, o las medidas de protección necesarias. 

En definitiva, la normativa tiene como finalidad proporcionar un marco claro y consistente que facilite la expansión de la infraestructura de recarga de vehículos eléctricos, promoviendo así la adopción de la movilidad sostenible.

Importancia de la ITC BT 52 en el sector de recarga de vehículos eléctricos

La Normativa ITC BT 52 comprende un pilar fundamental para la correcta implementación de infraestructuras de recarga eléctrica. Entre otras cosas, cumplir con estos estándares garantiza que los puntos de recarga sean seguros y funcionales; dos factores esenciales para el desarrollo y la confianza en la movilidad eléctrica.

En primer lugar, la ITC – BT 52 establece requisitos específicos para garantizar la seguridad tanto de los usuarios como de las instalaciones, abordando aspectos como la protección contra sobrecargas, cortocircuitos y otros riesgos eléctricos.

Por otro lado, la normativa busca establecer estándares técnicos que promuevan la interoperabilidad entre diferentes sistemas de recarga. Esto significa que los usuarios podrán utilizar diferentes puntos de recarga sin preocuparse por la compatibilidad técnica, facilitando así la movilidad de los vehículos eléctricos.

Además, la ITC – BT 52 establece parámetros concretos para la eficiencia energética en la recarga de vehículos eléctricos. Estos requisitos buscan optimizar el consumo de energía y promover prácticas sostenibles en la infraestructura de recarga.

En definitiva, la ITC – BT 52 juega un papel crucial al proporcionar un marco normativo sólido que impulsa el desarrollo seguro y eficiente de la infraestructura de recarga de vehículos eléctricos, contribuyendo así al avance de la movilidad sostenible.

Resumen de la ITC BT 52 recarga de coches eléctricos

A partir del 16 de diciembre de 2022, es requisito obligatorio seguir las directrices de la última normativa implementada en España que regula la instalación de infraestructuras de recarga para vehículos eléctricos en los estacionamientos de edificios. 

Como hemos visto, esta regulación conlleva modificaciones en algunas secciones del Código Técnico de la Edificación (CTE) y una porción del Reglamento Electrotécnico para Baja Tensión (REBT).

Superficies a las que aplica la normativa ITC BT 52

La guía técnica ITC-BT-52 se aplica en diversos contextos, por lo que es crucial tener en cuenta algunos de los más significativos:

  • Puntos de recarga en aparcamientos de flotas privadas: En este escenario, se requiere que las instalaciones proporcionen al menos una estación de recarga por cada 40 plazas disponibles.
  • Puntos de recarga en aparcamientos o estacionamientos públicos permanentes: Similar al caso anterior, las instalaciones deben suministrar una estación de recarga por cada 40 plazas en este tipo de aparcamientos.
  • Puntos de recarga en viviendas unifamiliares: En las nuevas viviendas unifamiliares que dispongan de estacionamiento o una zona destinada para vehículos eléctricos, se instalará un circuito para la recarga de coches eléctricos.
  • Puntos de recarga en edificios de régimen de propiedad horizontal: En este tipo de edificios y en aparcamientos colectivos, se establecerá una conducción principal a través de zonas comunitarias, con la posibilidad de realizar derivaciones hacia las estaciones de recarga ubicadas en las plazas de estacionamiento.
  • Puntos de recarga en la vía pública: Para la infraestructura ubicada en la vía pública, se llevarán a cabo las instalaciones necesarias para ofrecer servicio a las estaciones de recarga en las plazas asignadas, considerando los planes de movilidad sostenible tanto a nivel supramunicipal como municipal.

Medidas de protección contempladas en la ITC BT 52

La guía técnica ITC-BT-52 introduce varias medidas de protección que son esenciales para los puntos de carga de vehículos eléctricos. Si cuentas con un punto de recarga en tu comunidad de vecinos o vivienda unifamiliar, es crucial entender no sólo los requisitos de instalación, sino también las siguientes medidas de seguridad para proteger tanto tu seguridad como la de los demás.

Medidas de protección contra contactos directos e indirectos:

Se requieren diferenciales específicos para puntos de recarga de vehículos eléctricos, unos diferenciales que sean distintos de los utilizados en viviendas de tipo AC. Obligatoriamente, se debe utilizar un diferencial de tipo A, capaz de detectar tanto fugas de corriente alterna como continua.

Medidas de protección contra sobreintensidades:

La necesidad de protección contra sobreintensidades es común en diversas instrucciones técnicas, siendo crucial para la instalación de puntos de recarga. El tipo de curva del dispositivo determina el tiempo transcurrido desde que se detecta la sobreintensidad hasta que se interrumpe el suministro, proporcionando un intervalo de tiempo controlado por el magneto.

Medidas de protección contra sobretensiones:

Por último, se identifican dos tipos de sobretensiones: temporal/permanente y transitoria. La primera surge por la pérdida de neutro, provocando una subida de tensión en una instalación trifásica. En el segundo caso, las sobretensiones son provocadas por descargas atmosféricas y son puntuales. 

Independientemente del tipo, todos los circuitos deben estar protegidos contra ambas, y en algunos casos, puede ser necesario un dispositivo adicional de protección contra sobretensiones transitorias cerca de la estación de recarga, asegurando la coordinación efectiva entre ambos dispositivos.

La guía ITC BT 52 es más que un conjunto de normas técnicas; es un componente esencial en la transición hacia una movilidad más sostenible, marcando un hito significativo en el impulso de la movilidad eléctrica y sentando las bases para un horizonte más sostenible en el ámbito de la infraestructura de recarga.¿Quieres estar a la última en todo lo referente a la movilidad eléctrica? No te pierdas nuestros artículos del blog y, si necesitas asesoramiento profesional, en Chargeverse estaremos encantados de ayudarte. ¡Contacta con nosotros!